jueves, 26 de noviembre de 2009

PLAN TANDIL -DIA 3 /ÚLTIMA PARTE

24.12hs
Parados frente a Tandil iluminada. En silencio, Mati, Kim, Adam, Maia y yo. Las pequeñas luces se van alargando según uno entorne los ojos. De chico, para sentirme superhéroe, fingía que ese era mi poder. Controlar las luces del semáforo o de los faroles de las calles. Hacerlas crecer o disminuir según mi voluntad. ¿Dirigirlas hacia la escuela para que explote en pedazos? No, no era ese tipo de chico. Pero tampoco era como su hermana Lisa. Que quede claro.

24.28hs
Todavía no podemos despegarnos ni desviar la mirada. Las luces de Tandil nos atraen como mosquitos en torno a una lamparita. Oigo un movimiento y tengo miedo de que Maia salga corriendo hacia allá, pero no. Fue una sensación.

24.32hs
Kim intenta romper el hechizo y no lo logra.
-TENGO QUE HACER ALGO –me ruega al oído, inquieta hasta la médula.
Quiere seguir transitando hasta el alambrado, pero nosotros estamos parados en medio del tránsito, en transe, y con eso no transamos. Después de un tiempo sin parpadear la mirada cambia. Ya no son las luces de una ciudad en la oscuridad. Es la nave madre de un ovni, un collar de perlas sobre la montaña, el universo mismo, lo que vos quieras. De a poco vamos perdiendo el control y las luces se alargan solas. Se hacen más intensas, nos emborrachan, nos sobrepasan. Uf! Media vuelta y a refugiarse en la oscuridad. Ya se lo que sentía Drácula al mediodía. Es demasiada energía para un solo cuerpo.

24.37hs
Luego de enfriarme, vuelvo al ruedo. Si este es el poder de Tandil, ni me imagino lo que sería enfrentarse a París, la ciudad luz. Aunque esta es la ciudad de Luz, quizás no haya tanta diferencia.

24.40hs
Si tuviera que pintar un cuadro en este momento, sería uno de esos que se enchufan. Es la mejor forma de representar esta imagen, no me importa que sea arte berreta.
-Un artista verdadero tiene que ser objetivo –se me ocurre decir.
-¿Qué es lo objetivo? – se suma Maia al debate.
-Tiene que estar convencido de lo que hace y ve. Tanto como si lo sintiera objetivo.
-Pero nada es objetivo. ¿Hay una sola realidad acaso o varias realidades paralelas? Todos percibimos algo distinto.
Maia enciende su sonrisa de ardillita. Está tan contenta que parece en puntitas de pie cantando la la la la en su interior. Yo flaqueo en mi hipótesis y busco opiniones.
-¿Vos que pensás?
Adam está sentado sobre una roca, la ciudad le rebota en los ojos.
-A mí me perdiste en objetivo.

24.46hs
Con el cielo nublado y Tandil tan prendida, recuerdo una frase que escribí una vez:
Paradójicamente,
en las ciudades más iluminadas,
casi nadie mira a las estrellas.

Se lo comento a Mati, que está respirando hondo al horizonte con un sonido similar al que haría Moon-Ra, el inmortal.
-Lo que quería decir con la frase es que la intensidad de la vida en la ciudad distrae a la gente de las preguntas que surgen mirando hacia arriba –le explico.
-Ajá.
-Las luces de la ciudad pueden ser tan fascinantes como las de las estrellas. Esta es la evidencia. Ahora no es una metáfora: es literal.
-Ajám.
-Yo elegí las estrellas de ahí abajo, y son igual de potentes.
-¿Escuchás?
-¿Qué?
-…
-…
Se oyen los golpes de un molino chocando su veleta. Son rítmicos, casi musicales.
-El molino –dice Mati.
-¿Tu también lo escuchas? –dice Adam-. Es increíble.
Al don, al don, al don pirulero… cada cual, cada cual, atiende a su juego…

24.52hs
El momento ciudad va llegando a su fin. Fue mágico y místico. Pienso en el otro equipo con ampollas en los pies y siento que elegí bien mi camino. Me siento de suerte, y se me ocurre algo cursi:
La mejor historia siempre es la mía, porque la cuento yo.
Que sea cursi no quiere decir que no sea cierto. Y si es cursi qué. ¡Este es mi blog, qué tanto! (Por favor, no se vayan… )

1.15hs
De regreso en la casa, vemos llegar a los primeros miembros del otro equipo: Juan (embarrado), Paula (directo a la ducha) y Sabri (alteradita). La misión de Sabri es enviar a Mati en coche a por los otros y descansar en paz.
-Me pego una ducha y voy –dice Mati sentado. Tranquilísimo.
Sabri lo mira fijo un rato largo, pero no logra moverlo un centímetro.
-Porque los chicos están con hambre y frío –dice-. Habría que ir a buscarlos.
-Ya voy, me pego una ducha y voy –repite Mati, sin moverse.
Está muy mellow y sigue en pose James Bond. Es un James Bond Mellow. Los que lo conocemos sabemos lo difícil que es obligarlo a hacer algo que no quiere. Sabri ya puso sobre el tapete lo mejor que tenía: la mirada que guardaba para poner en penitencia a sus hijos en el futuro. Hizo lo que pudo, y se tiró a descansar.
-¿Caminaron mucho? –le pregunto.
-Todo el tiempo, sin parar. Un perro nos siguió hasta el final. El perro Tony lo llamamos. Terminó con la lengua afuera pobrecito.
-¿Por qué tanto? ¿A dónde iban?
-Luz nos quería mostrar un dique, o algo así –suma Juan con la toalla lista, y se va a bañar con Mati. Sí, con Mati. Mal pensados.
-¿Sufrieron mucho?
-Al principio, porque parecía que no llegábamos nunca –explica Sabri-. Pero en un momento entendí que en realidad íbamos en busca del dique interior. Ahí me relajé.

1.27hs
Maia cambia de medias por sexta vez en la noche.

1.39hs
Paula sale de su ducha de veinticinco minutos. No la conozco lo suficiente, pero pareciera que lleva puesta su cara de orgasmo.

1.44hs
Paula continúa desnudando su personalidad. Luego de escuchar el sonido de una Ferrari en su cuarto, entro para descubrir que es una profesional del secado de pelo. Tiene un turbo en la mano del tamaño de su cabeza, y sus pelos vuelan como si estuvieran haciendo un casting para Sedal. Paula me ve curioso y me convida un poco de aire caliente. Nunca necesité un secador de pelo. Recién ahora entiendo que el secador de pelo no se compra por necesidad: se compra por placer.

1.57hs
Descubrimos más detalles de la aventura del equipo perdedor. En algún momento de la ruta la cuestión subió y los ojos tomaron otro color. Pau y Sabri, dos señoronas bien, hacían de cuenta que no.
-¿A vos te hizo algo?
-No, para nada.
Y por dentro: uiiiiiiiiii.
A pesar de haber alcanzado el dique interior, finalmente llegaron a un dique exterior, que tomó la forma de una plaza con juegos. Se dividieron en parejas para subir a los subibajas, encontraron el equilibro sin tocar el suelo y así cada uno fue alcanzando su momento zen-sacional. Paula y Juan subieron a los toboganes mellizos, altísimos, para caer de culo sobre un charco marrón. Sabri asegura que en el aire Pau volvió a ser niña y se entregó al charco enterita. Pienso en todo el tiempo que pasó desde la última vez que me di un chapuzón o chapoteé bajo la lluvia. Qué desperdicio. ¡Con lo que me gusta la letra ch! El problema es que la lluvia suele encontrarme del lado de adentro y no salgo a buscarla. La miro desde el balcón cual viejo recordando su antigua versión.
Nota para la vuelta: Comprar botas de hule; recuperar la niñez.

2.13hs
Mati por fin cumple con su rol. Sabri respira aliviada.

2.33hs
Volvemos a ser un solo equipo. Sin rencores. Agus, después de tanto esfuerzo, terminó de construir su puente. Se abrazó con Juan cerca del baño en señal de agradecimiento y hermandad. Se quisieron más que nunca. Yo lo vi.

2.45hs
Comentarios de Tomi acerca del viaje:
-Era una ruta infinita hacia ninguna parte.
-En un momento comprendí que ya no había retorno. Y empecé a necesitar de alimento.
-Cuando Gaby llegó al rescate trajo una bolsa llena de pan. Comí rodajas compulsivamente sin parar. Nunca me sentí tan pobre.

3.02hs
Reunión en el cuarto para un segundo enrolamiento. Esta vez es mixto: chicochicochico abajo, chicachicachica arriba girando. Quiero ser el primero pero me discriminan por tener barro en el jogging. Me saco el pantalón y me acuesto sin mayor problema. Siento cataratas de risas detrás. ¿Será porque mi calzón es blanco? ¿O hay algo que me perdí? No importa, nada iba impedir que forme parte del enrolamiento. En el segundo turno la montaña continuó hasta una tercera capa chicochicachico. Alguien pidió pido. ¡Pido! ¡Pido! ¡Pido pido che! ¡¿No me oyen?! El bracito de Sabri se asomaba abajo desesperado. Yo, en mi platea/cama marinera, sonreía feliz. Eso le pasa por burlarse de mi calzón.

3.17hs
Sentados en el cuarto, Juan comenta el heroísmo de Agus:
-Cuando nos rescataste con tanta gana pensamos que eras…
-…
-…Panthro.
-¡Es verdad! Nunca lo había pensado en violeta: ¡es Panthro!
-Pasa que con Maga siempre creímos que Mati nos iba a salvar –explica Sabri-. Podíamos confiar en él, el amigo fiel, la roca.
-Mati nos va a salvar-Mati nos va a salvar, repetíamos –confirma Maga.
-Seguro, Mati tiene sus groupies. Y como es colorado flasheamos que era Leon-O.
-Ustedes lo creían Leon-O y él, con la sangre fría, fue James Bond.
-Pero al final cumplió.
-Cierto. Pasa que Mati es un clásico. Por eso se lo presentan tanto a otras amigas. Mati pudo haber nacido ahora o en 1930 y funcionaba igual. Es un clásico. Y los clásicos no fallan. Yo, en cambio, soy más de culto. Siempre supe que, si fuera un canal, sería I-sat.

3.36hs
Se arma la guitarreada. Mati, Maga y yo la observamos desde la nueva platea del living: una cama contra la pared que permite ver a la cocina de frente. La cocina tiene azulejos cuadrados, está resguardada por una barra e iluminada de una forma estelar. Es el escenario. Nacho, de musculosa y anteojos de sol, es ahora el protagonista. Él no lo sabe, pero lo es. Igualmente suele actuar como si lo fuera: rockstar hasta cuando va al baño o compra verduras en el almacén.

3.41hs
-Che, Mati, vos que fuiste a buscarlos… ¿qué tan lejos era?
-Los llamamos dos veces al celular y las dos veces nos dijeron que sigamos derecho.
Luz oye la conversación y confiesa:
-Ni siquiera llegamos a donde quería llevarlos. Pero shhhh.

4.00hs
Gore se ofrece a hacer puré. La gente canta:
-Goreee… el hombre papaaa… ha-ce pu-ré!
Pasa el tiempo y cada tanto Mati le chistea a Gore –ya en el escenario, cocinando- y le muestra el pulgar arriba.
-¡Buena Gore eh! ¡Esa! ¡Bien ahí!
Se da vuelta y comenta:
-En realidad no quiero puré, pero me gusta alentarlo.

4.34hs
Agus y Pau duermen en un colchón tirado.
-Aguuus –lo llamo.
-¡Agus! Aguuuus.. ¿Agus? Aaaaguuus –lo llamamos.
Again and repeat. Por cinco minutos. Hasta que se pone de pie, saluda con los brazos en alto y lo aplaudimos como si fuera su partido despedida. Alguien le convida un budín. Todos comentan lo bueno que está el budín. Deciden cambiar el término dique interior por budín interior. Muy lindo todo, pero no estoy de acuerdo. El dique se había ganado su lugar con el sudor de la frente de un equipo entero. O medio equipo. ¿Y con el partido ganado llega el budín para rubricar la goleada y robarse los flashes? Así no.

4.47hs
En la platea me sale un sonido de tono de teléfono y lo sostengo. Gaby se suma y juntos logramos el tono exacto. Pero el sonido va mutando y, sin darnos cuenta, terminamos exorcizando a Maga.

4.57hs
Adam trae el futuro en un maletín. Lo abre y de ahí salen sonidos electrónicos y luces de colores. Pau y yo bailamos como en una clase de aerobics. Más tarde mezclamos el aerobics con la improvisación teatral. Hacemos el pasito de craul, pecho y espalda, el lavado con shampoo y poniendo la tarta en el horno, entre otros. Fue nuestro momento más íntimo. Su cara de orgasmo no cuenta: esa la había compartido con todos.

11.23
Me levanto y llego al desayuno ya empezado. Luz me pide un abrazo sentada y se lo doy al revés, similar al beso del hombre araña. Es un abrazo interesante, porque las caras quedan alineadas con los genitales. Por algo prendió.

12.43hs
En la segunda sesión grupal de carta astral descubrimos que Gore está por cumplir treinta, lo que significa que sus planetas se alinean y él sienta las bases. O sea, se está haciendo marido. Además Juan y yo hablamos bajito cuando los otros gritan. Seremos buenos padres. También tengo límites de aire, y en ese aire mi duda baila con mi expansión, aunque no se sabe qué música escuchan. Por último tengo cierta tendencia a clasificar, coleccionar y preguntar cómo funcionan las cosas. Miro mis notas del viaje en los márgenes del cuaderno, los tachones y esa letra horrible que atraviesa las páginas en diagonal y resulta ser mía. No veo ninguna diferencia entre mi cuaderno y el de un científico loco. Las estrellas tienen razón.

13.02hs
¿Cómo, cuándo y qué chino fue el logró traducir la energía de las estrellas, codificarla en adjetivos adaptables a una personalidad y pegarla siempre? Me dejó pasmado. Tanto que la astrología es mi nueva apuesta a una religión, reemplazando a la brujería. Luego del desencanto en Dios y la falta de piel con el budismo me había propuesto ver un fantasma para reencontrarme con la fe. O que una señora me cuente mi vida entera sin que llegue a abrir la boca. Presenciar lo inexplicable, digamos.
-El mundo es inexplicable –me dice alguien.
-Sí, pero ya estamos acostumbrados.
Voy a comprarme todos los libros de Ludovica Squirru.

13.33hs
Posibles utilidades de la astrología:
Escribir personajes en base a una carta astral.
En la terapia no vale usarla. Es trampa.

13.36hs
Aspecto negativo de la astrología:
Al momento de nacer la energía de los planetas marca un gran porcentaje de nuestra personalidad. Somos un fotograma del universo. Sumale a eso los genes de nuestros padres –nuestra capacidad y potencial-, más la educación que recibimos –forma de pensar-, y qué nos queda. ¿Cuál es mi mérito? Ser el muchacho maravilloso que soy ya no es motivo de orgullo. Tengo que buscar otro motivo de orgullo. ¿Y si me compro unos hijos?

14.45hs
Abrazo grupal y despedida.
Próxima estación: Mar Azul.

Proximamente
Me linchan por buchón y me convierto en supervillano.
Posible frase característica:
Si me ves llegar, susurrá.
Si te llego a escuchar, perdiste.

6 comentarios:

moi dijo...

"Todos comentan lo bueno que está el budín. Deciden cambiar el término dique interior por budín interior. Muy lindo todo, pero no estoy de acuerdo. El dique se había ganado su lugar con el sudor de la frente de un equipo entero. O medio equipo. ¿Y con el partido ganado llega el budín para rubricar la goleada y robarse los flashes? Así no."

Procedo a explicar.

Tomando en cuenta muchas de las variantes que estaban puestas en juego en ese momento, en cuanto a las circunstancias y un ánimo y estado personal, en ese momento, cuando todo el grupo volvió a encontrarse en una misma habitación, yo estaba sufriendo bastante. Padecía de una suerte de encierro, a nivel espacial y quizás social. Esta tendencia no fue muy contemplada en el viaje, dado que gran parte del mismo, se desarrolló en el plano social.
La cuestión es que en ese momento cuando me miraba al espejo veía mis límites desdibujados, extendidos y fundidos hacia mi alrededor. también sentía que los demás se me metían por los poros. (una opción habría sido salir, pero el frío y la comodidad dictaminaron mi permanencia en un rincón)
En ese momento, Tomy, a quien descubrí como persona realmente perceptiva, me preguntó (a mí, agitada, quieta y en silencio) qué me pasaba.
Por supuesto, ninguna respuesta era trascendente en tanto aproximada a mi realidad, así que ni me acuerdo si le contesté.
Un rato después, empezó a circular un budín.
Cuando me llevé un bocado del mismo a mi boca, sus agradables cualidades me llenaron de placer (un poco por contraste a la incomodidad que estaba sintiendo) que debo haber expresado, como es mi costumbre con la comida, con un gemido.
Tanto Tomy, como Gore, que en ese episodio atravesaban una simbiósis humorística, nuevamente notaron mi reacción
y Tomy me dijo "ahora encontrá tu budín interior....
de eso deribaron cosas como:
"Panthro es un budín" (peculiar forma, propia de una persona drogada, para referirse al intenso amor por un amigo)
"Palermo encontró su budín interior"
"Yo tengo muchos budincitos" (Gore tomando Fernet de una caserola)

Quiero aclarar que una invetigación posterior me llevó a encontrar terminología específica del psicoanálisis y la filosofía, análogas a la figura del budín interior.

moi dijo...

derivaron

moi dijo...

cacerola!

Firulo dijo...

Recuerdo ese momento, acongojada contra la pared/ropero sin poder salir del centro de atención por una canción que se repetía al infinito:

"Plan Tandil!... Maia necesita.. etc".

Y si bien el budín interior es recuperar la felicidad, el término bebe directamente de dique interior, que me parece más trascendental por el sufrimiento y porque orginó el término.

No descarto el budín interior, pero lo ubico en un segundo plano, más personal.

Bia Consulting dijo...

Pero terminaste la historia justo antes de Mar Azul... se viene otra dentro de poco espero...

Firulo dijo...

y hasta ahora fui cumpliendo con una cronica por viaje...