viernes, 3 de octubre de 2008

LIMITES DEL MARKETING POLITICO

Es sabido que los políticos pagan a expertos para diferenciarse de los demás a través del cuidado de su imagen, sus slogans y discursos. La pregunta es desde cuándo. Y cuál es el límite.
¿El bigote de Hitler fue programado? ¿O era un capricho del Führer?
¿Y el bigotón de Stalin? Quizás la mano escondida de Napoleón era para mantener a la gente intrigada. ¿Fidel tuvo que contenerse las ganas de afeitarse durante décadas?
¿Y las patillas de Menem? ¿Por qué se las recortó después de ganarse el voto del pueblo? ¿En la reuniones internacionales con gente importante no le convenía mostrarse como un personaje del Planeta de los Simios? Sospe..

1 comentario:

Diego dijo...

Firuloo! Firuloooo!!!
Me cacho, lo liquidaron sólo por descubrir el asunto de la entidad secreta que determina esas cosas que hacen los políticos para dif...